El verano en Laciana es suave, relajado y muy recomendable. El valle de Laciana cuenta con un valor ecológico único. Nuestro hotel se ubica en pleno valle, rodeado de montañas llenas de bosques mixtos. Pasar un verano en Laciana es rodearse de naturaleza viva. La vegetación autóctona y los prados de los alrededores de nuestro hotel convierten a la zona en un lugar realmente interesante.
Por qué pasar el verano en Laciana
Un entorno excepcional, que, de hecho, fue declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO en el año 2003. Su riqueza de flora y fauna lo avalan. Y es que en Laciana conviven dos especies protegidas únicas en la península: el oso pardo y el urogallo. Por su parte, la naturaleza resulta exquisita en nuestra zona. Precisamente un verano en Laciana es ideal para disfrutar del entorno, gracias a las temperaturas pero también al momento de los prados. Laciana está también declarado Lugar de Importancia Comunitaria en Red Natura 2000. Y es que es una zona en al que se aúnan paisajes, fauna, flora...realmente únicas, dignas de visitar.
Un verano en Laciana da la oportunidad de disfrutar de cultura, tradición y naturaleza. Hacer turismo rural por Laciana es conocer costumbres de nuestros ancestros y pasear por localidades que conservan muchas tradiciones. Es también ideal para respirar aire puro, escuchar el silencio y admirar la inmensidad del valle. El senderismo es otra de las actividades más recomendadas en un verano en Laciana. Te ofrece la posibilidad de conocer los paisajes más espectaculares, perderte entre sus árboles y respirar sus aromas. Todo el que se va a andar por nuestras montañas pierde el sentido del tiempo. es una actividad terapéutica. Por supuesto, disfrutar de una jornada de picnic, montar en bici, avistar animales, practicar deporte al aire libre... son solo ejemplos de algunas de las propuestas para un verano en Laciana
No podemos olvidarnos de la gastronomía. Y más si venís a nuestro restaurante, y que es una de los aspectos de los que más orgullosos nos sentimos. Todo lo que esté acompañado de una buena comida es mejor. Así que, un verano en Laciana también sabe a gastronomía casera de león, hecha con amor y con productos de la tierra.
